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La Flor de Lis y Maria Magdalena - Segundo septemio

Foto del escritor: shanandaisanandashanandaisananda

Actualizado: 9 abr 2024



SEGUNDO SEPTENIO (8 A 14) - Cimiento de la vida anímica, del mundo interior. La base de lo psicológico

 

Es una etapa “Puente” entre las cualidades esenciales del primer septenio y el tercero, ni tan en el nido ni tan en el mundo. Hemos tenido una primera etapa de formación de nuestra individualidad en la convivencia con el hogar familiar, hemos individualizado nuestro cuerpo físico, y hemos construido la base de la confianza en nosotras mismas y en el mundo, esto continúa estructurándose en el segundo septenio.

Hemos ido aprendido a “volar” y estamos listas para “salir del nido y conocer el bosque”, que sería el colegio. En esta etapa de puente, la autonomía de vuelo es corta, y la nutrición del nido aún es de vital importancia.


Este septenio viene con el cambio de dientes. Hemos roto con el cordón umbilical de la madre, pero hemos creado un segundo cordón umbilical con los seres que más amamos por una necesidad de protección, por lo que este segundo cordón umbilical energético lo creamos con aquellas personas que sentimos que nos protegen.


Cuando vemos que ese alguien no nos protege, nos anclamos en la siguiente persona. Este segundo cordón umbilical no solemos romperlo hasta los 21 años o más.


Necesitamos de una AUTORIDAD AMADA (Un ejemplo a imitar), amor, adultos formadores capaces de mostrarnos que el mundo es bello, de una manera verídica, imaginativa, sagrada, porque lo vivimos como verdad en nosotras mismas. La autoridad amada debe entregarnos una validación precisa hacia nosotras, ya que necesitamos sentirnos vistas, reconocidas y valoradas.


Entre los nueve y diez años hacemos un giro hacia lo objetivo, surge en nosotras la necesidad de ser interiormente personas que nos confrontamos con el mundo. Antes de este giro,  nosotras y el mundo somos uno solo.


Poco a poco el espacio interno comienza a configurarse, a través de los sentimientos que tenemos de cómo nos sentimos percibidas y recibidas por el mundo y de cómo  recibimos nosotras  al mundo en nuestro interior. En este septenio se establece el dualismo interno-externo. Esto pertenece a la esfera del alma, que constituye el mundo interior.


Es una etapa de dar y recibir, de darse y ser recibida, de vínculo entre nosotras y el mundo. En esta realidad de estar en el mundo exterior y a la vez en el interior, desarrollaremos el pensar, el sentir y el querer.


Los niños hombres conquistarán el mundo externo. Lo que importa es la vivencia del impulso de la voluntad y la fuerza, la vitalidad se dirige hacia actividades planeadas, energías dirigidas, excursiones por la naturaleza, desafíos.


Las niñas mujeres conquistarán el mundo interno. Tendencia al exclusivismo, sueños de fantasías, falta de tolerancia y manías, enredos llenos de subentendidos. Disminución de las energías y del desempeño objetivo por el súbito crecimiento. Una vez iniciada la menstruación, la vitalidad normal retorna y la tempestad se disipa.


Es en este septenio es cuando entramos en la preadolescencia entre los 10 y 12 años y entre los 12 y los 14 años entramos en la adolescencia temprana. A los 14, cuando se cierra este ciclo, entramos en la adolescencia media de los 14 a los 16.


Durante la preadolescencia, el ritmo de crecimiento disminuye, se sigue creciendo pero más lentamente. Las niñas comenzamos la preadolescencia antes, por lo que es solemos desarrollarnos físicamente antes que los niños. El cuerpo en la preadolescencia ya no es como en la niñez, pero tampoco llega a desarrollarse como en la adolescencia.


Esta fase se caracteriza por los siguientes aspectos:

  •       Duelo por el cuerpo y por la relación infantil con los padres

  •       Reestructuración del esquema e imagen corporal

  •       Ajustes a emergentes cambios sexuales físicos y fisiológicos

  •       Estímulo de las nuevas posibilidades que abren estos cambios

  •       Necesidad de compartir los problemas con los padres

  •       Fluctuaciones del ánimo

  •       Fuerte autoconciencia de necesidades

  •       Capacidad de evaluar mayores méritos y debilidades

  •       El juego mantiene su importancia

  •       La disciplina se acepta con exigencia de derechos y preocupación por la justicia

  •       Afirmación a través de oposición

  •       Curiosidad investigativa, interés por el debate

  •       Relaciones grupales con el mismo sexo

  •       Movimientos de regresión y avance en la exploración y abandono de la dependencia


En la preadolescencia, ocultamos nuestros pensamientos ante los adultos. En ocasiones somos agresivas y apasionadas en la defensa de nuestros intereses. Confiamos más en nuestros amigos que en los adultos. En el comportamiento nos predominan las contradicciones porque por un lado mantenemos conductas infantiles, mientras que por el otro, comenzamos a dar indicios de independencia que se acentúan más y se manifiestan durante la adolescencia. 


La adolescencia temprana conlleva muchos cambios físicos, psicológicos, emocionales y de prioridades. Donde antes el núcleo importante era la familia,  el amor y la protección que nos brindaba el nido, ahora la prioridad empieza a ser el grupo, los amigos y la aceptación y reconocimiento de ese mundo externo al nido.


Si el primer septenio no ha sido cerrado y los aprendizajes de este han quedado inconclusos, se reflejara en cómo nos relacionamos con el mundo externo. La inseguridad, la carencia afectiva, no sentirnos amadas y protegidas, nos sumergirá en la búsqueda de todas esas carencias que contenemos en el exterior.


En este septenio se manifiesta nuestro propósito de vida y las experiencias que nos darán la consciencia del Yo individual. Darnos cuenta de que somos seres individuales nos hace darnos cuenta de lo que hay a nuestro alrededor.


Durante este septenio estamos desarrollando el segundo chakra. Este chakra está relacionado con el respeto hacia nosotras mismas, nuestra libertad de ser como queremos ser y la capacidad de tener intereses y actividades diversas. Es nuestro centro de poder, de creatividad, de sexualidad y guardamos en el las programaciones de los programas activados en el subconsciente. Las mujeres tenemos el útero físico y en su interior el chakra Kundalini y el útero energético en la zona del segundo chakra.


Este es el centro de los sentimientos. Este centro nos permite experimentar las emociones, cambios de humor, es decir todos los extremos de la vida emocional. Es un centro receptivo. Es nuestra relación con nuestro sagrado femenino, recordad que este chakra rige la zona de nuestro útero y en el interior del útero tenemos el chakra Kundalini. Es un chakra en el cual domina el flujo de energía femenina.


Cuando no lo desarrollamos equilibradamente durante este ciclo, tenemos tendencia  a sentirnos insatisfechas con la relación sexual, llegando a tener desprecio al acto físico. Algunas personas que no han desarrollado este chakra correctamente, tienen conductas enfermizas relacionadas con el plano sexual o incapacidad para gestar vida. No desarrollarlo también afecta en nuestra creatividad y en nuestras creaciones, en nuestra autoestima al no reconocer a la Diosa interior que reside en nuestro útero y a nuestro poder interior.


Para activar este chakra se recomienda el baile donde sea necesario mover las caderas como el merengue, salsa. Se recomienda hacer ejercicio como la natación.

Es en este ciclo donde tenemos que desarrollar la Consciencia espiritual.


Consciencia espiritual: Esta es la hoja inferior derecha y se corresponde con el segundo septenio. En este septenio desarrollamos la consciencia espiritual en relación al Yo soy un ser individual y conecto con mi interior para encontrar mi identidad. Como un avance en el camino espiritual, nuestra comprensión del mundo y el universo están cambiando, más bien, se puede ampliar y expansionar la conciencia y la percepción de una nueva realidad  mucho más rica y expandida se manifiesta para percibir la realidad de las dimensiones superiores. Se da la creación y la expansión de conciencia espiritual cuando integramos y comprendemos que somos seres Divinos cumpliendo una misión en el plano de la tierra. Tenemos el alma más allá del cuerpo y están unidos y tomamos consciencia de que el  Gran Espíritu de vida de todo lo creado habita en todo lo que es y existe, que hay una realidad invisible compuesta de múltiples planos, realidades y dimensiones, incluso más allá de la realidad visible.


Espiritualidad = Manifestar y materializar el espíritu


Este nivel de consciencia te guía a como tienes que abrir y cerrar los ciclos de tu vida. Si con el poder de la Tierra nos enraizamos a la materia de la Tierra y eso nos da una base sólida del desarrollo de la personalidad, la consciencia espiritual nos enraíza a la sabiduría de que somos seres espirituales viviendo una experiencia humana. Encarnamos para aprender a ser humanos conscientes. Todos formamos parte de la raza humana pero no todos desarrollamos la consciencia espiritual ni la humanidad consciente.

A los 9 años tu ángel guardián se ocupa de tu auto consciencia interior para que te centres en todo lo bueno que traes de otras vidas. Actúa para que tú te reconozcas diferente a tus padres.


A los 12 años tú Yo espiritual te muestra lo que tienes que buscar en la vida. Te guía en la interiorización alejándote de la familia para que puedas crear tu entorno social y surja de manera natural, que quieres estudiar y que quieres en la vida.


La mayoría de nosotras, hayamos nacido donde hayamos nacido, accedemos a esta consciencia espiritual a través de las distintas religiones. Toda religión es una manipulación de la verdad, en consecuencia la consciencia espiritual que adquirimos terrenamente hablando, no contiene las bases para el correcto desarrollo de este nivel.


Afortunadamente en lo personal, yo a los 12 años empecé a leer libros que hablaban de otra realidad, eran libros basados en la filosofía budista sí, pero hablaban de cosas muy distintas a la religión católica y a mí me abrieron a un mundo que me mostró la amplitud de la consciencia espiritual y fue mi sostén en los momentos más complicados de mi vida.


Este segundo septenio se desarrollara en función de si el primer septenio, tuvo el desarrollo correcto o si por el contrario no lo hemos cerrado y hemos mezclado el primer y segundo septenio.


Para el correcto desarrollo de este septenio será importante:

  •       Alimentación sana y equilibrada

  •       Nada de violencia de ningún tipo

  •       Espacios de meditación y conexión con el ser interior

  •       Autenticidad

  •       Intuición e imaginación

  •       Aprendizaje a través de la admiración (Personas que le educan en valores a través del ejemplo)

  •       Aprendizaje del mundo

  •       Compartir

  •       Trabajo en equipo

  •       Hábitos de vida en comunidad

  •       Reflexión (No castigos o imposiciones de razón de adultos)

  •       Equilibrio interior trabajado a través de la expresión artística (teatro, música, pintura, canto), de deportes de equipo y de contacto con la naturaleza


En este segundo septenio integramos los hábitos emocionales de nuestros padres, por lo que vivido en desequilibrio puede manifestar violencia, soberbia, pereza, envidia e intolerancia al fracaso.


Para hacer una toma de conciencia pregúntate a ti misma (Anota las respuestas en una libreta para que después puedas reflexionar y hacer la toma de consciencia de porque este ciclo no está cerrado):

1.      Escuela primaria, enseñanza recibida, ¿Te gustaba? Materias preferidas y no preferidas. ¿Eras buena alumna?

2.      ¿Tenías buena memoria? Relación con tus profesores y compañeros

3.      ¿Eras una niña imaginativa, creativa?

4.      Tus vacaciones. Actividades deportivas y en la Naturaleza.

5.      Tus juegos. Tus libros. Tus obligaciones.

6.      Relaciones con la gente de tu familia. Costumbres.

7.      ¿Quién era tu persona referente más importante?

8.      ¿A qué autoridades temías?

9.      ¿Quiénes eran las personas que sentías que te protegían?

10.  Normas implantadas: positivas y negativas.

11.  ¿Conocías el amor, el respeto?

12.  ¿Cómo eran los castigos y los reconocimientos?

13.  ¿Tenías dinero de bolsillo, pequeños ingresos?

14.  ¿Qué rol jugaban la estética, el arte, el mundo de las imágenes en tu hogar, en tu casa?

15.  ¿Tuviste oportunidad de un quehacer artístico: música, pintura, modelado, teatro, danza?

16.  ¿Qué valores eran importantes para tus padres?

17.  ¿Se permitían tus sentimientos, se los respetaba?

18.  ¿Cómo vivías las injusticias?

19.  ¿Sentiste un cambio especial a los 9 años?

20.  ¿Qué acontecimientos exteriores importantes positivos o negativos recuerdas?

21.  ¿Cómo era tu mundo de sentimientos: odio, amor, compasión, celos, envidia, miedos?

22.  ¿Notaste cambios especiales, interiores o exteriores, alrededor de los 12 años?

23.  ¿Cuáles eran en aquel tiempo tus deseos vocacionales?

24.  ¿Tenías que realizar trabajos especiales?, ¿Cuáles te agradaban y cuáles no?

25.  ¿Eras tratada con justicia?, ¿Tenías un sentimiento de justicia frente a los otros?

26.  ¿Podías traer amigos a casa o estabas más a menudo en la casa de otros?

27.  ¿Qué tipo de vestimenta llevabas?

28.  ¿Te sentías bella o fea?

29.  ¿Tenías otros sentimientos acerca de ti?

30.  ¿Qué disposición de temperamento se perfilaba en ti?

31.  ¿Cuál fue el período de crecimiento principal en esa época?

32.  ¿Eras una niña fuerte o débil?

33.  ¿Cómo se ordenó la respiración y la circulación?, ¿Sufrías frío en pies y manos?, ¿Sufrías frío frecuentemente o siempre sentías calor?

34.  ¿Qué enfermedades tuviste en ese tiempo?, ¿Medicamentos, hábitos alimenticios, accidentes, fracturas, operaciones?

35.  ¿Cuándo fue la primera menstruación?

36.  Los 9 - 10 años a los 12 años: ¿Como los recuerdas, cual era tu deseo profesional?

37.  ¿Hubo alguna experiencia vivencial de alto impacto emocional durante este ciclo?

38.  ¿Experimentaste el espacio de estar en conexión con tu ser interno?

39.  ¿Tuviste la inquietud de buscar tu propia identidad?

40.  ¿Qué miedos desarrollaste en este ciclo?

41.  En este momento ¿En qué aspectos sientes que este segundo ciclo ha marcado tu vida?

42.  ¿Crees que fue en este septenio en el que te quitaron definitivamente tu poder y te arrebataron tus sueños?

43.  ¿Qué emociones integraste en ti provenientes de tus padres?

44.  ¿Qué aspectos de este ciclo crees que no has podido cerrar y has ido arrastrando a los siguientes septenios porque el primer ciclo no se cerró?

45.  ¿Ves alguna similitud con el primer septenio del porque no pudiste cerrarlo?

Anota tus respuestas en tu libreta y reflexiona sobre ellas intentando realizar el proceso de comprensión del porque no cerraste este ciclo.


Haz un esquema del segundo septenio, con los acontecimientos más devastadores o que te dejaron más marcada en ese ciclo y que crees que fueron los detonantes de no cerrar ciclo.


Toma la lista de los miedos que desarrollaste y escribe para cada miedo:

  •       La causa que lo creo

  •       El efecto que tuvo durante el segundo ciclo

  •       El efecto que ha tenido a lo largo de los siguientes ciclos

  •       ¿Son los mismos miedos que desarrollaste en el primer ciclo o incorporaste alguno más? ¿Cuáles?

Cuestiona cada uno de esos miedos y si tiene algún sentido que sigas manteniéndote en él


 



Trabajando con María Magdalena

Tras haber realizado la toma de consciencia a través de las preguntas sobre las que hemos reflexionado

  •       Abre tu espacio sagrado invocando la presencia de María Magdalena

  •       Pon tus manos en tu chakra corazón

  •       Visualiza una esfera de luz dorada en el centro de tu corazón

  •       Solicita a la Maestra: Amada Maestra María Magdalena, solicito tu asistencia y guía amorosa para que me brindes la información de la que no soy consciente y que percibo desde la percepción subjetiva del dolor y quizás recuerde distorsionada del ciclo de mi segundo septenio, para poder aprender, sanar, liberar y cerrar ese ciclo que en este sagrado ahora tiene que cerrarse para el bien más elevado de mi desarrollo humano y espiritual

  •       Respira profundamente 3 veces llevando, con el poder de la intención, la respiración hasta tu segundo chakra

  •       Siente como de tu segundo chakra se extiende un cordón de luz dorada, que se extiende en sentido descendente a través del chakra raíz  hasta el corazón de la Madre tierra y te enraízan a ella. Visualiza la triple llama Magdala en tu segundo chakra

  •       Siente la presencia de María Magdalena

  •       En este momento se abre la comunicación con la Maestra que va a brindarte la información de todo aquello que necesitas aprender, liberar y sanar de tu segundo septenio

      Puedes preguntarle lo que desees al respecto, pedirle que te aclare in situ aquello que te cree dudas y pedirle pautas de trabajo consciente para poder cerrar y dar por acabado ese ciclo

  •       Recoge las respuestas a través de la escritura (abriendo los ojos para escribir) o grabarte con el móvil (Si ves que te dispersas al abrir los ojos)

  •       Solicítale ahora que te brinde la información de aquellos aspectos pendientes para el desarrollo completo del segundo nivel de consciencia, la Consciencia espiritual

     

  • Cuando finalice la comunicación, solicita a la Maestra que equilibre tu  segundo chakra y sane la energía residual contenida en ese centro energético con la triple llama activa en él y que te ayude a hacer el proceso de comprensión  de todos los aspectos inconclusos de este segundo septenio (Tanto de los que tú has tomado consciencia en el primer ejercicio, como de los que te ha develado ella porque tú no eras consciente)

  • Solicítale las pautas de trabajo específico que tienes que llevar a cabo de forma consciente, tanto para asumir los aprendizajes y cerrar ciclo como para desarrollar de forma consciente la consciencia espiritual

  • Al finalizar, agradece a la Maestra y cierra el espacio sagrado. Permanece unos minutos en absoluta quietud, permitiendo que la energía sanadora de la Maestra circule por tu cuerpo

  • Si detectas alguna programación errónea desarrollada en este septenio corta esa programación:

      Yo (Tu nombre legal), aquí y ahora entrego la programación errónea que desarrolle en mi segundo septenio. Jamás me ha pertenecido, jamás la he necesitado y hoy corto y cancelo aquello que jamás ha estado en mi esencia, liberándome de esta programación. Gracias (x3) Hecho está (x3)


Rito de paso de la Conciencia Espiritual





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